Es probable que algunos de nuestros recuerdos más felices en la niñez son cuando jugábamos con barro y no es para menos, ya que se ha demostrado los beneficios que tiene el interactuar con barro para los más pequeños. Los niños son más creativos y saludables. Algunas investigaciones afirman que jugar con barro beneficia a los niños de forma física y mental.
Es saludable para todo su cuerpo (músculos, huesos, pulmones, corazón, etc) y mantiene a los niños activos. El jugar desarrolla los sentidos, la capacidad de fuerza, el control muscular, el equilibrio y la autopercepción.
Muchos padres se preocupan por la higiene y la seguridad, pero la realidad es que esto los limita un poco de explorar.
Muchas veces podemos ver los niños jugando afuera si el día anterior a llovido de seguro que no faltara un niño que brinque en un charco con agua y lodo.
Muchos son los niños que tiene inclinación por jugar con la tierra y el lodo, si no cuentas con un jardín o un patio para que puedan divertirse no hay de que preocuparse más, pues aún en el espacio más reducido podrás conseguir ese lugar. Para ello puedes liberar un área de la casa y luego colocar una lona.
Jugar con lodo fortalece el sistema inmune. El sistema inmune se encarga de proteger a las personas de agentes externos como es el caso de gérmenes y bacterias que atentan contra la salud.
El contacto con la naturaleza es necesario.
Ayudemos a los niños a tener más actividad física para combatir la obesidad. La falta de actividad física estimula la obesidad un problema que afecta a gran parte de la población infantil.
Aportación Precious Momento Child Care