Mi nombre es Estrellita Alaffa, nací en Tamaulipas, México, el 19 de febrero de 1982. Me gradué en una carrera técnica en Administración de Empresas, trabajé en México como secretaria en un despacho jurídico por tres años, después me casé y emigré a los Estados Unidos desde el año 2003.

Soy madre de cuatro hijos, dos de ellos tienen autismo y aunque no ha sido fácil mi resiliencia me ha ayudado a reinventarme como madre y al mismo tiempo en lo laboral.

En el 2012 tomé un curso para obtener mi licencia de CNA en el estado de Texas y trabajé por casi cuatro años en un asilo para ancianos, donde puse en práctica todo el amor, paciencia y empatía que mis hijos me fueron enseñando mientras iban creciendo. pero al mismo tiempo las necesidades de mis hijos fueron requiriendo más y más de mi tiempo, así que decidí dejar mi trabajo y dedicar tiempo completo a mis hijos.

En el año 2018 nuevamente emigramos ahora al estado de Wisconsin, buscando nuevas oportunidades y aunque por varios años estuve en casa siempre tuve la inquietud de hacer algo más.

Así que en el año 2020 me uní como voluntaria al grupo de Líderes por la Salud, de la Sixteenth Street Clinic, donde participé como promotora de salud y recibí capacitación en abogacía comunitaria. Esta gran experiencia fue una gran herramienta para desarrollarme profesionalmente pues en el año 2023 empecé a trabajar con

UW-Madison Extensión, como Bilingual Nutrition Educator, y a finales de este mismo año fui nominada para ser parte de la mesa directiva en la Sixteenth Street Clinic y ahora es un orgullo para mí, ser parte de esta mesa directiva.

Por lo tanto, cada día refuerzo más mi compromiso con mi familia y mi comunidad, mi resiliencia me impulsa a cultivarme como individuo, vivo para ser útil en la vida de las personas que me conocen y siento el compromiso moral de servir el interceder por aquellas voces que no son escuchadas.

Aunque ser madre de dos hijos con autismo no ha sido fácil, ya que son muchos los desafíos que enfrentamos cada día, pero también son muchos los momentos gratificantes que vivimos cada día y eso es lo más importante.

Lo que más disfrutamos en familia es hacer actividades al aire libre, me complace ver sus sonrisas, su inocencia y el amor incondicional de cada uno de mis hijos.